Ávila tuvo Alcázar. No fue ni tan inmenso como el de Toledo ni tan majestuoso como el de Segovia, pero al igual que otras ciudades castellanas, Ávila contó con una fortificación, anexa a la muralla en su parte más débil, que hizo las veces de guarnición y campamento militar.
Situado en el espacio donde se enclava la actual plaza Adolfo Suárez, se asentaba compartiendo los muros de la muralla y el torreón del homenaje. Su origen puede remontarse al siglo XII-XIII, aunque solamente hay constancia a partir del siglo XV. Pese a lo inmenso del edificio, siempre necesitó reparaciones, llegando al siglo XVIII en un estado casi de ruina, siguió necesitando grandes reformas o saneamiento que no siempre llegaban, y su agonía se prolongó unos siglos más, hasta el siglo XX.
Manuel Gómez-Moreno lo recogió en su Catálogo Monumental y Artístico de Ávila (1901) y durante el primer cuarto del siglo XX sirvió como estudio a artistas como López Mezquita, Caprotti, Chicharro o Alberti. Sin embargo, su estado de “ruina” y abandono, sirvió para el Consistorio, con el alcalde Salvador Represa a la cabeza, llama a derribar el Alcázar, como vemos en el artículo no firmado siguiente:
«Tiene un enorme interés el pleito promovido en torno al derribo del famoso paredón de Ávila, objeto de tantas y tantas controversias…
…El pleito se ha ido prolongando y revistió ya en estos últimos meses caracteres agudos. Ávila quería que el paredón se tirase, (SIC) por estimar que así lo exigía la modernización” y por estimar también que el muro no guardaba ningún mérito artístico ni histórico,
El propio Ministro de Instrucción Pública giró una visita a la ciudad acompañado de las autoridades abulenses y, al parecer, , quedó de acuerdo con estos en que estaba indicado el derribo. Esta fue al , la creencia de Ávila, que esperaba ávidamente la resolución del asunto.
Hace unos días apareció la Real Orden del Ministro de Instrucción. Y esta disposición contrarió total y vivamente los deseos de la ciudad…
El alcalde de Ávila, cabeza visible y entusiasta de este movimiento a favor del derribo del paredón envió un enérgico telegrama de protesta al presidente del Consejo…Convocó Don Salvador Represa una reunión de las personalidades y representantes más destacados de la ciudad, se convocó el domingo día 10…el pueblo invadió las salas del Ayuntamiento, siempre el Alcalde a la cabeza de los manifestantes-…tras visitar el gobierno civil la muchedumbre se encaminó al paredón iniciando, dirigida por las personalidades citadas, el derribo de este con picos y palas en contra de la disposición ministerial. Al día siguiente, por la tarde, tras aquel primer derribo simbólico de la jornada anterior, el Ayuntamiento organizó formalmente las obras de derribo, dirigidas por el arquitecto municipal don Carlos Camuñas.
Aparte del interés local, del interés que para Ávila pueda tener este asunto del derribo del paredón, hay también en él una extraordinaria importancia que a nadie se ocultará” (*)
Dicho y hecho, el Alcázar, o mejor dicho, lo que quedaba de él, fue derribado y convertido en la plaza que nos ha llegado hasta hoy. De nada sirvió que clamaran en contra de su derribo y se abogara en su conservación en virtud del patrimonio de la ciudad. Un total atropello con total impunidad y que contó con el apoyo del pueblo.
Paradójicamente, ochenta años después de su derribo, en 2010, se procedió a una intervención arqueológica para realizar una cronología precisa de la estructura y la distribución del inmueble, en los que se hallaron los cimientos y muros del ya desaparecido alcázar.
- La información del artículo está extraída, al igual que las fotografías, de la página www.avilas.es proyecto de José Luis Pajares, en donde pueden encontrar más fotografías del desaparecido Alcázar, así como también otras fotografías de la historia de Ávila.
Sólo hay fotografías de la destrucción. ¿No hay fotografías del Alcázar completo?.
Desgraciadamente no hay ninguna en la que se aprecie bien, sólo algunas en las que se ve que tenía tejado y poco más. Se conservan algunos planos de su estructura y poco más. Puedes ver lo poco que aparece del Alcázar en avilas.